En un evento reciente, realizado en las instalaciones de la CEPAL, se presentó el proyecto “Movilidad Humana y Derechos: Fortalecimiento de las organizaciones migrantes y promigrantes para la participación política e incidencia pública en Chile”, financiado por la Unión Europea, e implementado por Fundación Avina en conjunto con Observatorio Ciudadano, y el Instituto Católico Chileno de Migración, INCAMI, así como cuenta con la colaboración de la Red de Organizaciones Migrantes y Promigrantes. Este proyecto, que se extenderá por un período de dos años, tiene por objetivo fortalecer el rol de las organizaciones migrantes y pro-migrantes para asegurar la participación de sus comunidades en la construcción de pactos sociales y políticos, que garanticen el acceso y ejercicio efectivo de sus derechos civiles, políticos, económicos, sociales y culturales en Chile.
Al respecto, Andrea Castellón, delegada de la Red de Organizaciones Migrantes y Promigrantes, se pronunció: “es saludable que la Unión Europea, la CEPAL y la Fundación Avina, avancen hacia la solidaridad migratoria. Desde la Red, aportamos con nuestra propia voz lo que hemos cocreado en territorios a diario, minuto a minuto, en experiencias durísimas y hermosas de solidaridad, plenas de humanidad y desarrolladas en un contexto de vacío del estado en el tema migratorio, donde tiene responsabilidad. Deseamos seguir aportando, incluso mucho mejor, pero con nuestros derechos reconocidos como corresponde, con dignidad, en un Chile cambiante. Para bien, en muchos aspectos, hemos contribuido desde la incidencia política en los temas migratorios, y pretendemos seguirlo haciendo. Se necesitan políticas nacionales y multilaterales, porque los derechos de las personas viajan con ellas, y si bien los estados tienen sus potestades, estas no pueden sacrificar los derechos humanos de nadie”.
A su vez, este evento, contó con la participación de Jorge de la Caballería, jefe de la Unidad para América Latina y el Caribe de la Dirección General de Alianzas Internacionales de la Unión Europea (UE), Mario Cimoli, secretario General interino de la Comisión Económica Para América Latina y el Caribe (CEPAL) y Eduardo Thayer, director del Servicio Nacional de Migraciones de Chile.
Jorge de la Caballería señaló: “Los temas migratorios implican desafíos crecientes y complejos para todas las sociedades, ya que tienen que ver con el tratamiento y la dignidad de las personas. La UE ha entregado apoyo a Chile en esta materia a través de distintos instrumentos, en vista del importante aumento de la población migrante en el país en los últimos años. Entendemos la importancia de fomentar acciones que contribuyan a la integración de las poblaciones migrantes en las sociedades que los acogen para que puedan ejercer adecuadamente sus derechos y fortalecer así la cohesión social”.
Por su parte, Mario Cimoli, subrayó que “desde hace años la CEPAL viene abordando los asuntos migratorios en la región desde una visión de desarrollo y derechos, y recalcó que, como organismo de las Naciones Unidas, la Comisión defiende una visión multilateral y de cooperación genuina en materia migratoria entre los países y los actores interesados”. Destacó además que, a lo largo de casi tres décadas, la CEPAL y la Comisión Europea han aunado fuerzas para fomentar y consolidar una alianza sólida entre América Latina y el Caribe y Europa.
Entre las intervenciones, también se realizó la de Eduardo Thayer, a través de un saludo pregrabado, en el que expresó: «como Servicio Nacional de Migraciones nos interesa conocer las experiencias, exitosas y no, que ha tenido la Unión Europea en materia de migración, no solo en cuestión de fronteras sino en políticas de integración e inclusión de personas migrantes. Si bien no hay modelos replicables, si hay un diálogo y aprendizaje respecto a la realidad de la Unión Europea, en materia de migración, que es sumamente necesario… Nos interesa desarrollar esacios de colaboración, y montar un sistema que permita hacer que la política migratoria esté conectada con las necesicades del desarrollo social, económico, y cultural del país, y hoy en día, no tenemos esta arquitectura”.
La actividad consideró la realización de un conversatorio que tuvo como objetivo generar un intercambio sobre la perspectiva europea y del Gobierno de Chile sobre la agenda migratoria, identificando desafíos comunes y áreas de intercambio y colaboración, considerando además el contexto internacional actual y las implicancias del proceso constituyente para la construcción de políticas migratorias inclusivas y justas.
En esta instancia también participaron Gala Barrezueta, asesora de Gabinete y y jefa de la Unidad de Género de la Dirección del Servicio Nacional de Migraciones ; Pamela Ríos, gerenta programática regional de Migraciones, de la Fundación Avina; Leonardo Moreno, director País Chile de la Fundación Avina; Carolina Stefoni, académica de la Universidad de Tarapacá y experta en Migraciones; Andrea Castellón, vocera de la Red de Organizaciones Migrantes y Simone Cecchini, director del CELADE, División de Población de la CEPAL.
Durante la actividad, Pamela Ríos, gerenta programática regional de Migraciones, de la Fundación Avina, manifestó: “Este es un evento muy importante, porque pone de manifiesto la relevancia de hallar estos espacios en que distintos actores nos sentemos a la mesa a conversar sobre migración y solidaridad. Es notable poder articular un diálogo entre las organizaciones migrantes, la academia, el gobierno y la Unión Europea, porque de esta manera se pueden construir bases sólidas para avanzar. Desde la fundación, estamos aquí para aportar y también para colaborar en este tipo de vínculos que nos permitan configurar un país más acogedor, intercultural y próspero, donde se respeten los Derechos Humanos de todas las personas”.
Cabe decir, que el proyecto se presenta en un contexto, en el que las tendencias migratorias en la región siguen aumentando, debido a múltiples factores. Ya son 1.5 millones de personas extranjeras que viven en Chile, de las cuales 750.000 han ingresado en los últimos cuatro años (INE y DEM, 2020), considerando además que Chile se convirtió en el tercer país de la región con mayor acogida de población venezolana, migrante y refugiada, y se proyecta al 2022 un total de 562.000 personas, según el último informe de la Plataforma Nacional de Coordinación para la Respuesta a los Venezolanos (R4V).
Deja una respuesta
Usted debe ser conectado para publicar un comentario.