Refugio Venezolano en cifras: Un panorama sombrío

Las cifras sobre refugio venezolano reflejan muchas de las cosas denunciadas por las Organizaciones de la Sociedad Civil acerca de la política del actual Gobierno en la materia. La imposición de procedimientos administrativos que no contempla la ley, sumado a los rechazos masivos y la falta de información sobre la materia hacen todo más difícil para las personas que buscan asilo en el país. Tomando en consideración el gran desplazamiento de venezolanos en la región, desde el 2016 a la fecha, un aumento importante en las personas que manifiestan intención de solicitar refugio y quienes logran formalizar dicha solicitud. Este incremento se vio detenido en junio de 2019.

Desde abril de 2010, fecha en la que se implementa la ley N° 20.430  “ESTABLECE DISPOSICIONES SOBRE PROTECCIÓN DE REFUGIADOS”,  se puede evidenciar que la proporción entre las solicitudes de refugio y los reconocimientos u otorgamientos de esta figura se mantuvo en un promedio más o menos estable durante el período 2010 – 2015.

Desde el  2010  y 2016 los nacionales de Colombia, Cuba y Siria fueron quienes más solicitudes pudieron formalizar. Los colombianos buscaron refugio en Chile producto del desplazamiento provocado por la violencia, mientras que la llegada de solicitantes de refugio sirios se debe a un acuerdo entre Chile y ACNUR que trajo al país alrededor de 150 personas.

“Colombia es un país que lleva más de 60 años en un conflicto político-social armado. Tenemos una larga historia de desplazamiento interno y hacia el exterior. Los principales destinos fueron Estado Unidos y España pero, en 2005, con las medidas restrictivas en ambos países los desplazados colombianos comienzan a mirar a la región, es ahí donde Chile aparece como destino. Un país con el que compartimos el idioma y con una economía sólida”, señala Miguel Samaca, integrante del colectivo Raíces de Resistencia.

Sin embargo, a partir de 2016 se produce un aumento significativo en las solicitudes, que no va de la mano con los reconocimientos.

Nacionales de Colombia (5460), Cuba (4430) y Venezuela (3271) encabezaron las solicitudes de refugio formalizadas ante el Departamento de Extranjería y Migraciones durante el período 2016 – 2019. Sin embargo, las solicitudes de refugio cayeron significativamente a partir de 2019, donde sólo 780 personas pudieron formalizar sus solicitudes.

El gobierno chileno ha puesto trabas administrativas para evitar que la gente acceda al refugio. Lo han denunciado las ONG’s  y se condice con las bajas significativas que han experimentado las solicitudes.

La abogada de la Clínica Jurídica a Migrantes y Refugiados de la Universidad Diego Portales, Francisca Vargas, señala que el estado no le puede negar el acceso al procedimiento a los solicitantes “La autoridad no puede pensar de mala fe respecto de los administrados. Pero si un estado tiene ese temor de que la gente se aproveche del sistema, existen procesos y apoyo técnico del ACNUR para realizar procesos acelerados, en el que la gente puede ejercer su derecho y las autoridades proteger la institución”, puntualiza.

Respecto al reconocimiento de la condición de refugiado, vemos que, aunque las solicitudes formalizadas aumentaron considerablemente entre 2016 y 2018, el número de solicitudes reconocidas por el Estado, se han mantenido bajas entre 2010 y junio 2020, con sus puntos más “altos” en 2017 y 2018 donde se superaron las 150, como se observa en el Gráfico N°1.

El panorama del refugio venezolano

Hoy la población proveniente de Venezuela que reside en el país representa el 30,5% de la población extranjera, situandola como la más numerosa, producto del crecimiento vivido entre los años 2018 y 2019, donde incrementó en un 57,6%.

En esta línea y como vimos antes,  los solicitantes de refugio venezolano también crecieron en cantidades mucho mayores a otras nacionalidades. Por eso llama la atención que, a diferencia de lo que sucede en el resto de los países de América Latina, el número de personas que han ingresado al país señalando que solicitarán refugio cayera de manera tan abrupta desde la imposición de la visa de responsabilidad democrática (VRD) y la visa consular de turismo a venezolanos.

Para la doctora Marcia Vera, académica Universidad Queen Mary de Londres, “la respuesta de Chile se ha caracterizado por medidas ad-hoc o temporales como la visa responsabilidad democrática, cuyos requerimientos en la práctica han terminan creando, como ya sabemos, más irregularidad migratoria”.

Como se observa en el Gráfico N° 2, 16.748 personas provenientes de Venezuela manifestaron la intención de solicitar refugio a la autoridad fronteriza al ingresar al país durante 2019. Al desglosar el dato por semestre, el número de personas que indicó su intención de solicitar refugio al ingreso fue de 16742 hasta antes de la instauración de la visa consular de turismo (junio 2019), cayendo a 24 durante el segundo semestre y cerrando en sólo 2 personas durante el primer semestre de 2020

La explicación de la autoridad ante la baja de este número dice relación con la visa de responsabilidad democrática (VRD), instrumento administrativo que se solicita en los consulados chilenos para poder ingresar al país. La Organización de Estados Americanos felicitó al país por este instrumento, en el último informe sobre migración y refugio venezolano, sin embargo, omiten señalar que, desde abril 2018 a septiembre 2020, solo un 26,6% de las solicitudes de Visa de Responsabilidad Democrática (VRD) han sido otorgadas, y un 38,8% continuaban sin resolver, lo cual se suma al rechazo masivo y cierre en los procesos de dicho visado que se dieron en noviembre 2020.

Esto ha provocado un sustancial incremento en el ingreso por pasos no habilitados,  que durante 2019 alcanzó las 3.333 personas provenientes de Venezuela y que durante 2020 llega a las 4.226 (hasta septiembre).

Pero volvamos al refugio venezolano. De las cerca de 16 mil 700 personas que manifestaron su intención de solicitar refugio en Chile, sólo 226 (Gráfico 3) pudieron formalizarlas, lo que muestra claramente que existen trabas para acceder a la formalización de la solicitud. 

El embudo se vuelve mucho más estrecho a la hora de ver el número de personas reconocidas como refugiados, ya que desde 2010 a la fecha, sólo 17 venezolanos han sido reconocidos en tal condición.

La explicación del jefe del departamento de extranjería y migraciones (DEM) del Ministerio del Interior, Álvaro Bellolio, en entrevista con El Mercurio en febrero de 2019, es que la acumulación de solicitudes de asilo durante el período (2017 – 2018)  se debería a una “banalización” de la visa de refugio, ya que a su juicio, actualmente, “cualquiera podía pedir refugio bajo cualquier condición”.

“Muchos se pasaron el dato porque pensaron que era una visa más fácil de obtener, con una permisividad total de la administración apoyados por ciertas organizaciones. (…) La gran mayoría dice que viene por oportunidades económicas, creen que la visa de refugio es normal y no una necesidad de protección ante una persecución política”, finalizó el jefe del DEM.