Fuerza compatriotas, Ojala que pase pronto este momento.

Hace ya unos días nos vimos enfrentados a una ola de violencia verbal por parte de la sociedad que elegimos integrar.

Hemos recibido el apoyo de muchos que se han levantado con positivas reacciones frente a comentarios aparentemente xenófobos. Este escenario nos hace pensar que el problema no es, precisamente, la aparición de un caso de Lepra, por lo que creo relevante abordar el fondo del asunto.

¿Que ganamos en rechazar las discriminaciones por la lepra si seguimos apoyando fundaciones con nombre como por ejemplo ‘’ leche para Haití’’, que claramente es parte de la construcción que los medios de comunicación realizan de nuestra imagen? Y que, a pesar del duro momento que estamos sufriendo, siguen con campañas de difusión utilizando las mismas imágenes de miseria y devastación, que usan para provocar pena y para sensibilizar.

Señores, los discursos discriminatorios que estamos escuchando hoy, no se han instalados de un día para otro, no son productos del flujo migratorio proveniente de Haití en los últimos años, ni tampoco es consecuencia de la cantidad de haitianos que se encuentra en el país. Estamos lejos de ser los más numerosos y no somos los únicos en ingresar en gran volumen.

Estas reacciones xenófobas y discriminatorias son resultado de campañas mediáticas, noticias e información  que la sociedad chilena viene absorbiendo desde hace un buen tiempo, donde sólo han podido conocer una sola cara de Haití. Imágenes y slogans de sensibilización que se enraízan en inconsciente colectivo, mostrándonos como un país expuesto a cualquier tipo de situación dañina.

Haitianos queridos, creo que es tiempo de perder el miedo y decir lo que pensamos. Basta de poner la otra mejilla y llorar incesantemente debajo de la cama. Sabemos muy bien que no es suficiente decir no a la discriminación, lo que necesitamos es reconstruir la mentalidad  de una sociedad que es víctima, igual que nosotros. Lo que necesitamos es la sensibilización de los cazadores de sensibilización.

                      No más techo para Haití, sálvanos mostrando la otra cara de Haití

No más leche para Haití, sino que libertad real, con posibilidad de toma de decisiones sin intervenciones

Tu lógica solidaria, tu mirada continental de la ‘’solidaridad’’ durante todos estos años resulta ser una pesadilla para los haitianos en el Chile de hoy.

                         No más Cité soleil y anba lavil, queremos un toque de belle-ville y Pacot

            Nos duele que saques fotos en Croix-des-bouquets, mientras duermes en Peguy-ville

 Nos duele que grabes el río  portail leogane, mientras descanses en los mejores resorts de Montrouis

Entregar detalles sobre la ‘’LEPRA’’ no hace que se cambie la percepción que tiene la gente de los ciudadanos haitianos. Pueden cambiar de opinión sobre esa enfermedad, pero en unos meses más vienen los mismos discursos discriminatorios ante cualquier otro asunto. Lo que está sucediendo no tiene nada que ver con Lepra, la misma ministra de salud dice  que todos los años descubren algunos afectados de dicha enfermedad. HOY ES TEMA PORQUE EL AFECTADO HA SIDO UN HAITIANO.

Escribo estas líneas asumiendo todos los riesgos que me puede significar. Estoy dispuesto a que me marginen o cualquier otra cosa, a cambio de la tranquilidad de mis compatriotas y que vivan sin estas constantes humillaciones.