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La crisis Migratoria en Europa

La crisis Migratoria en Europa

Europa siempre ha sido un polo de atracción para personas de distintas latitudes. Su rica historia cultural, la estabilidad que presentan algunos países de la Unión Europea y las oportunidades económicas y laborales que se exhiben para personas que provienen de países de África, Asía y Latinoamérica, se demuestran como aspectos relevantes. Esto último, sin lugar a dudas se refleja en una de las causantes que instan a grandes movimientos migratorios, no solamente de ahora, sino desde el siglo XIX a la fecha.

La actual crisis migratoria que se ha visto en Europa en el último tiempo[1], ha marcado un constante reflejo de que las condiciones que presentan algunos países africanos y asiáticos, dista mucho de los patrones democráticos y de respeto de los DD.HH de cada uno de sus ciudadanos. En ese sentido, “el conjunto de la Unión Europea se juega su imagen en esta crisis. Con cuatro millones de refugiados llamando a sus puertas, las 27 naciones no pueden permitirse más titubeos y mezquindad.Lamentablemente, la reacción de la UE ni siquiera se cuenta entre las peores. Los países del Golfo, cuya responsabilidad azuzando la guerra civil siria es aún mayor que la de Occidente, se niegan a acoger a un solo refugiado”[2].

Otro punto importante a considerar en este episodio es el rol de Estados Unidos, pues la oleada de migrantes y/o refugiados a la que hace frente la Unión Europea ha convertido al gobierno americano en blanco de críticas, no solo de sus propios ciudadanos, sino de la comunidad internacional. Si Estados Unidos no hubiese adoptado un papel tan pasivo en Oriente Próximo, la oleada de refugiados pudiera haberse evitado y así haber evitado una bola de nieve que ya ha estallado.

Ahora bien, es necesario recordar que todos los países de la Unión Europea, desde hace algunos años, se encuentran viviendo una enorme crisis migratoria y humanitaria y es ésta sin lugar a dudas una de las mayores dificultades que están enfrentando desde la Segunda Guerra Mundial.Surge como consecuencia del creciente número de Refugiados que solicitan asilo y del cada día mayor número de Migrantes Económicos que llegan buscando un mejor y más seguro destino en estos estados miembros de la Unión Europea.Para lograr su fin, los migrantes realizan peligrosas travesías por el Mar Mediterráneo, observando lamentables consecuencias que no logran su destino final. Por otra parte, desde el sudeste de Europa[3] provienen migrantes, principalmente, de países del Oriente Medio, África, Asia del Sur y losBalcanes Occidentales, es decir, desde Siria, Afganistán, Eritrea, Nigeria, Bangladés, Sudán, Gambia, Irak, Albania, Pakistán y Somalia, principalmente.[4]

Podemos señalar que la principal característica de este proceso migratorio que se ha manifestado en el último tiempo, es que se compone de una migración forzada de víctimas de conflictos armados, con altos niveles de pobreza, persecuciones, violaciones de los derechos humanos y por cambios climáticos y que para el logro de estas nuevas oportunidades de vidas futuras, en sus  traslados son presas fáciles de redes delictivas transnacionales de tráfico ilícito de migrantes que los transportan en condiciones precarias y de enorme peligro y que en oportunidades han dado origen a tragedias muy lamentables. También es posible reconocer que se encubren abusos tales como la Trata de Personas con propósitos de explotación de migrantes vulnerables, especialmente de mujeres y niños.

Según el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados, ACNUR, la cantidad de migrantes que han cruzado el Mediterráneo durante este año es cercana a las 390.000 personas. La Oficina Internacional para las Migraciones, OIM, nos señalauna cifra un tanto menor. Ingresaron por esta ruta marítima a la Unión Europea principalmente a través de Grecia e Italia para continuar hacia Europa Central y Europa del Norte. Antecedentes proporcionados también por la OIMinforma que cerca de 300 personas han fallecido o desaparecido trágicamente en naufragios en el Mar Mediterráneo durante el período de estos 10 meses del presente año.

El análisis de estas cifras proyecta una cantidad superior a los 400.000 migrantes y/o refugiados para fines del año 2015 y para fines del año 2016, una cantidad de 450.000 migrantes y/o refugiados. En los dos años sería una cifra cercana a los 850.000. Todos buscando refugio y un futuro en la Unión Europea[5].

Una solución a este asunto la describen en su artículo Michael A. Clemens y Justin Sandefur, donde plantean como hipótesis que “más de 200.000 personas salieron de Hungría tras la revolución de 1956. La respuesta coordinada de 37 países transformó en inversión lo que parecía una carga. Resolver la crisis actual pasa por un acuerdo global que desmonte los campamentos e integre a los refugiados[6]. Por consiguiente, esta crisis migratoria, postergada nuevamente, (dado que el foco de las agendas gubernamentales europeas está concentrada en combatir el terrorismo del Estado Islámico), se requiere de una vez por todas de una política migratoria clara para la Unión Europea, de voluntades políticas de los primeros ministros y jefes de gobierno de cada uno de los países y de un proceso de integración e inserción social por parte de la ciudadanía de la Unión Europea para que este gran flujo migratorio se convierta en una inversión y no en un costo para sus ciudadanos.

 


Columna redactada por Héctor Pezoa Moraga. Profesor y Académico. Director de la Fundación de Integración y Desarrollo Social, FINDES. Max Iriarte Santoro. Cientista Político y Académico.

 

[1]Hacemos alusión a las grandes corrientes migratorias que se han visto por todos los medios de comunicación desde los meses de abril a la actualidad, caracterizado por ciudadanos sirios, entre otros, que buscan refugio en algunos de los países de la Unión Europea por la guerra civil que azota a su país y atenta contra los DD.HH de estas personas.

[2]Tamames Jorge.  Esperando a Europa… y al resto del mundo. Ver en Revista de Política Exterior. Septiembre de 2015.

[3]Tomamos como referencia el vídeo que se viralizó de la periodista húngara Petra Laszlo pateando a una familia de refugiados y dejando una impotencia grave por los tratos que se ven a diario en este proceso.

[4] El destino final de estos migrantes son principalmente países estables y que han adoptado políticas restrictivas para su ingreso: Alemania, Francia y España como principal destino.

[5]Consideramos estas cifras como oficiales de estos organismos internacionales (ACNUR y OIM), pero en la realidad se desprende que no son solo miles los que cruzan fronteras para un futuro mejor.

[6]Michael A. Clemens y Justin Sandefur. Gestionar la crisis migratoria desde el interés propio. Ver en Revista de Política Exterior, noviembre de 2015.