Intensa actividad fue la que cumplió recientemente en Arica la socióloga María Emilia Tijoux, doctora en sociología de la Universidad París VIII – Francia y coordinadora del doctorado en Ciencias Sociales de la Universidad de Chile, quien en jornada matinal participó en el seminario «Migración y Derechos Humanos de Niños y Niñas: Visibilizando la Inclusión», organizado por la Junta Nacional de Jardines Infantiles (Junji), y por la tarde, en la Universidad de Tarapacá, en una charla sobre «Elementos teórico-metodológicos para leer la inmigración».
Fuente: Universidad de Tarapacá
En el seminario de la Junji participaron también, José Barraza, asesor regional del Consejo de Monumentos Nacionales y José Tomás Vicuña, director de Fundación Ciudadano Global Servicio Jesuita a Migrantes.
La Dra. Pamela Zapata, informó que en base a experiencias de proyectos de investigación Fondecyt, que ha llevado la Dra. Tijoux como investigadora principal, presentó en la UTA una serie de situaciones metodológicas en torno a teorías, metodologías y dilemas éticos en investigación con migrantes en la ciudad de Santiago. Así mismo, resaltó la importancia de la observación y de estudiar lo que no se puede decir en palabras, principalmente en torno al racismo que se vive en Chile en contra de los extranjeros.
Esta actividad, que se realizó en la sala de eventos de la Escuela de Ingeniería Eléctrica-Electrónica, campus Saucache, fue dirigida estudiantes de pregrado, especialmente de la asignatura de psicología social II y el electivo de formación profesional: metodologías cualitativas en la intervención comunitaria. También a académicos del Departamento de Filosofía y Psicología y se contó como invitados especiales a representantes de la ONG Corfal de Arica.
La visita de la Dra. Tijoux se enmarca en la línea de investigación que se encuentra desarrollando junto a la Dra. Pamela Zapata, en migraciones, integración y políticas públicas.
También participó de una actividad para vincular la investigación y el pregrado,
patrocinada por el Convenio de Desempeño de las Humanidades, las Ciencias Sociales y las Artes, en su línea de Psicología.
La Dra. Zapata coordinó además una reunión de trabajo con directivos de Corfal, el director del Departamento de Filosofía y Psicología, y académicos del mismo departamento con quienes trabaja en el programa de investigación e intervención en población migrante, y se está planeando el desarrollo de nuevos proyectos conectando la Universidad con la sociedad en torno al fenómeno migratorio.
EN ANTOFAGASTA
Previo a su viaje a Arica, la Dra. Tijoux asistió en Antofagasta al «Conversatorio sobre Migración», organizado por el Consejo de Cultura y Estación Antofagasta.
Allí escuchó testimonios como el siguiente: «Me han dicho regresa a tu país, no tienes los mismos derechos. Incluso en el casino de la escuela aseguran que no tengo derecho a reclamar o comprar. En Antofagasta hay discriminación, hay racismo y lo sentimos a diario. Yo valgo igual que todos y cuando me insultan les digo que son ignorantes».
Según consigna el diario El Mercurio de esa c iudad, hasta aplausos sacaron estas palabras de una estudiante del Liceo de Niñas, Marta Narea Díaz. La joven, de origen colombiano, mostró una personalidad que sorprendió al público.
Otro joven del Liceo Mario Bahamonde también contó sus experiencias en la reunión. «Creen que son mejores porque están en su país y son más blancos. Me han molestado por mi color y mi forma de hablar. Eso pasa en las escuelas de Antofagasta», indicó.
MALESTAR
Ambos testimonios grafican bien las situaciones a las que se exponen los inmigrantes, especialmente de color, en los colegios de Antofagasta.
El malestar que expresaron los alumnos fue analizado por María Emilia Tijoux, y también por el sociólogo y académico de la Universidad de Antofagasta, César Trabucco. La conclusión a la que arribaron los expertos es que en Antofagasta no existe xenofobia, sino más bien racismo y clasismo.
Para María Emilia Tijoux, eso se da porque en la historia de Chile siempre fue un objetivo alcanzar la ‘rubiedad’, es decir, blanquear la raza.
«De ahí vienen las comparaciones. Tú eres más negrito, tú eres trigueño, más moreno. Esto lo vimos en la historia y ahora lo hemos visto en distintas investigaciones sobre inmigración», dijo la doctora.
Para Tijoux, el anterior no es en todo caso el único mito que afecta a la sociedad chilena. Todo lo contrario, a su juicio existen muchos más.
«Hay mitos, como que los negros saturan el sistema educacional y el público, pero el INE sostiene que la cifra de inmigrantes es de 2,4% a nivel nacional, es decir, no existe saturación de nada, sólo somos racistas, es más, el inmigrante ilegal es un manjar para las empresas porque es mano de obra barata’, explicó.
María Emilia Tijoux agregó que la inmigración en el país se ‘femenizó’, pues la mayoría de las personas que está ingresando son mujeres.
Otro punto destacado por Tijoux es que si bien está el rechazo, hay también una atracción inmensa a lo que «no se puede tener».
«Las mulatas y mulatos, negras y negros, atraen a miles de chilenos. Sentimos una atracción tremenda por lo que a la vez no queremos tener. Esta atracción se ve en el trabajo del cuerpo, en la cintura pequeña, en la curvilínea mulata, en el musculoso hombre negro. Son atractivos», manifestó.
Durante la conversación María Emilia Tijoux comparó la situación de Antofagasta con la migración que se produce en Francia, y sostuvo que ambas son «muy racistas».
«Francia es un país muy racista. Tiene la más alta votación para el Frente Nacional, pero la gracia es que tiene muchas asociaciones y políticas que permiten un equilibrio», dijo.
La socióloga agregó que Antofagasta se parece a la Francia de los años 60, cuando en dicho país se buscaba mano de obra argelina para la metalurgia.
«Tenemos que ver de qué modo nuestras interacciones son más humanas, pero no desde el humanismo liberal, sino del social, donde los derechos humanos no se trastoquen», concluyó.
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